miércoles, 15 de julio de 2009

Justificación Por La Fé

Gálatas 2:16 “Sabemos que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe en Jesucristo. Así, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley; porque por las obras de la ley ninguno será justificado”.

La palabra justificación es un término legal que podemos entender dentro del marco de un tribunal o de un juicio, como lo vemos en 1 Reyes 8:32: “Escucha desde el cielo, obra y juzga a tus siervos. Condena al impío, volviendo su proceder sobre su cabeza, y justifica al inocente para darle según su justicia”. Y en el nuevo testamento se le consideraba como una declaración de inocencia, es decir, que justificar es declarar a una persona justa: por lo tanto justificación no es hacer una persona justa, sino declararlo justo, es claro en entender que justificación es todo lo contrario a condenación.
Podemos decir entonces que justificación significa dos cosas: Perdón y ser declarado justo. Al mirar la justificación como perdón lo vemos en las declaraciones del apóstol Pablo en Romanos 4:6-8: “David habla también de la dicha del hombre a quien Dios atribuye justicia aparte de las obras. Dice: *Dichoso aquel a quien Dios perdona sus maldades, y cubre sus pecados. Dichoso el hombre a quien el Señor no cuenta sus pecados contra el”. Note que Pablo compara justificación con el perdón, una persona justificada es una persona a quien el Señor perdona sus pecados.
Pero la justificación es mucho más que el perdón, es ser “declarado justo”, en otras palabras, no es que solo Dios perdona, sino que entra en una relación especial con Dios quien lo ve como justo y lo trata como tal. Entonces la justificación es el perdón y la declaración de libertad de toda condenación y castigo. Así como el hijo prodigo que al llegar casa no solo es perdonado sino que su padre lo cubre con su manto y le da la bienvenida al seno de la familia.
Elena G. de White lo explica de la siguiente manera: “Su vida fue impecable, murió por nosotros y ahora ofrece quitarnos nuestros pecados y vestirnos de su justicia. Si os entregáis a él y lo aceptáis como vuestro Salvador, por pecaminosa que haya sido vuestra vida, seréis contados entre los justos por consideración a él. El carácter de Cristo toma el lugar vuestro, y vosotros sois aceptados por Dios como sino hubierais pecado” (El Camino a Cristo. Pág. 64)
La justificación es justicia por proclamación, Dios proclama que el pecador es justo, no porque el pecador haya hecho algo para merecerlo sino porque Dios en su bondad la ofrece y el pecador la acepta. Pensemos como en el caso del indulto: El juez tiene todas las evidencias claras que es culpable, pero decide pasar por alto estas evidencias y le extiende la declaración de indulto y desde ahora es tratado como un ciudadano normal.
La biblia dice que “todos hemos pecado” que “no hay justo ni aun uno” hay evidencias suficientes de que somos pecadores, pero, el Señor decide declararnos justos y somos tratados como si nunca hubiésemos pecado.
PD: si en algún momento de tu vida, te has sentido tan miserable que sientes que Dios no te perdonara, recuerda que, él toma tu lugar y eres contado entre los justos…


3 comentarios:

  1. Me gusta cuando mencionas que Dios proclama que el pecador es justo, no porque lo merescamos si no porque Dios es bondadoso y la ofrece... Esas palabras me dan consuelo, porque en los momentos que sientes que tú no puedes alzar la mirada, que estas lejos de Dios... sabes que él aún te extiende la mano y camina contigo llevandote en sus brazos...Hermoso Habitante..No dejes de escribir.

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  2. falta estudio en las caidas de satanas?... pues la parte tres dice Continuara...

    Gracias

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  3. Tema de las cuatro caídas de Satanás terminado, espero que terminén su estudio.

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